Beneficios de la Ley Beckham

La Ley Beckham, también conocida como el régimen especial para trabajadores desplazados o simplemente Ley de Impatriados, es un régimen fiscal especial en España destinado a aquellos trabajadores que se trasladan al país. Bajo esta ley, ciertos individuos que anteriormente residían en el extranjero pueden beneficiarse de un tratamiento fiscal más favorable en comparación con el resto de contribuyentes españoles.

¿En qué consiste la ley Beckham?

En España, los trabajadores están sujetos al Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF), un impuesto progresivo que aumenta según los tramos de ingresos. La Ley Beckham ofrece a los trabajadores desplazados la posibilidad de pagar un porcentaje fijo de impuestos, en lugar del IRPF progresivo. En términos numéricos, los desplazados que se establezcan en España pueden tributar a un 24% en lugar de los porcentajes variables del IRPF, que oscilan entre un 19% y un 47%.

El propósito de la Ley Beckham es atraer a trabajadores nacionales e internacionales altamente calificados, incentivándolos a tributar en España al considerarlos no residentes. Esta atracción se logra mediante una significativa reducción de impuestos durante los primeros seis años de residencia en el país, que incluyen el año del cambio de domicilio y los cinco años subsiguientes.

En virtud de la Ley Beckham, los trabajadores solo deben pagar el Impuesto de Patrimonio sobre los bienes situados en España, no sobre su patrimonio global como ocurriría sin este régimen fiscal. De igual modo ocurre con el Impuesto Temporal de Solidaridad de las Grandes Fortunas (ITSGF).

La aplicación de la Ley Beckham tiene un límite temporal, ya que solo puede utilizarse durante los seis primeros años de residencia en el país. Para renunciar a este régimen o cuando se agota el período máximo de seis años, es necesario notificarlo a Hacienda entre noviembre y diciembre del año anterior.

¿Cuáles son los requisitos para disfrutar de este régimen?

Para beneficiarse de la Ley Beckham, es fundamental cumplir con ciertos requisitos, como no haber residido en España durante los cinco años anteriores al traslado, tener un contrato laboral con una empresa española y, en caso de ingresos de empresas extranjeras, que estos no superen el 15% de los ingresos anuales totales. Además, aquellos extranjeros que ocupen cargos de administración en empresas españolas no pueden poseer más del 25% del capital social.

¿Quién se puede beneficiar?

Es importante destacar que la Ley Beckham no está disponible para autónomos, trabajadores por cuenta propia, directores de empresas ni deportistas profesionales. Sin embargo, a partir de 2023, los autónomos extranjeros desplazados que teletrabajen desde España pueden acogerse a este régimen fiscal, siempre y cuando demuestren que su actividad emprendedora genera un interés en el país. La definición de "interés para España" puede ser subjetiva y dependerá de la capacidad del trabajador para demostrar la contribución positiva de su actividad a la economía española, como la generación de empleo o beneficios para empresas locales.